A 40 años del terremoto de 1985, la Municipalidad convoca a los vecinos a compartir sus testimonios para reflexionar sobre el pasado y fortalecer la conciencia sísmica
El sismo que transformó a Godoy Cruz: un llamado a preservar la memoria y fomentar la prevención
Archivo: Diario Los Andes
Hace cuatro décadas, el 26 de enero de 1985, un sismo de gran magnitud sacudió el Gran Mendoza, dejando a su paso destrucción y una huella imborrable en la vida de los godoicruceños.
Así, en conmemoración de este evento, el Programa Memoria Viva y Participación Ciudadana con la Junta de Estudios Históricos del departamento trabajan en conjunto. Es que, el Municipio lanza una convocatoria para recopilar relatos, imágenes y recuerdos vinculados a aquella experiencia sísmica.
Cabe destacar que, la iniciativa busca reunir material audiovisual, escrito o gráfico que permita documentar el impacto del terremoto en la comunidad. Por lo tanto, quienes estén interesados pueden enviar sus aportes al correo electrónico lajuntaconvoca@gmail.com. Para ello se deberá acompañar el material enviado con los datos personales y una autorización explícita para la publicación del material.
Además, quienes deseen compartir sus testimonios de forma presencial o donar material relacionado pueden acercarse al Archivo de la Bodega Arizu (Belgrano 1322). Así, la recepción será de lunes a jueves, de 9 a 13, hasta el 28 de febrero.
El impacto del sismo de 1985 en Godoy Cruz
El terremoto, que ocurrió a las 00:07 h, afectó especialmente a barrios como Villa Marini y Villa Hipódromo. En esos distritos, numerosas viviendas construidas en adobe quedaron destruidas. Asimismo, la imagen del Hospital El Carmen, con su fachada gravemente dañada, se convirtió en símbolo de la devastación.
En los días posteriores, las autoridades y la sociedad trabajaron arduamente para atender a los heridos, brindar refugio a los damnificados y empezar a delinear la reconstrucción del departamento. Por lo que, establecimientos educativos, polideportivos y otros espacios públicos se utilizaron como refugios temporales. En tanto, los terrenos del ex Matadero (calle Joaquín V. González) albergaron a cientos de familias en carpas.
Sin embargo, a pesar de las dificultades económicas y habitacionales, el terremoto marcó el inicio de un proceso de transformación urbana en Godoy Cruz. Es que, incluyó la creación de nuevos barrios como La Estanzuela y el acceso a créditos para reconstrucción.
Fachada Hospital El Carmen, enero 1985
Un llamado a la prevención sísmica
La iniciativa no solo busca rescatar la memoria colectiva. También, el objetivo es generar conciencia sobre la importancia de estar preparados ante futuros desastres.
Mendoza, situada en una zona de alta actividad sísmica, necesita fortalecer la educación en prevención y protocolos de acción.
«Aprender del pasado es clave para construir un futuro más seguro», destaca la Magister Fabiana Mastrangelo. Por lo que la resiliencia y el conocimiento pueden salvar vidas en una región donde la amenaza sísmica es constante.
A través de esta convocatoria, Godoy Cruz se propone honrar su historia y reflexionar sobre sus aprendizajes. De esta manera se garantizará que las generaciones futuras estén mejor preparadas para enfrentar los desafíos de la naturaleza.
