Está destinada a perros y gatos de los puestos. El proyecto busca mejorar la salud animal y proteger la biodiversidad en la región
Está destinada a perros y gatos de los puestos. El proyecto busca mejorar la salud animal y proteger la biodiversidad en la región
El Municipio en un trabajo conjunto con el IADIZA-CONICET, ha iniciado una nueva campaña de vacunación antirrábica en el piedemonte. La misma está orientada a proteger a perros y gatos de las áreas rurales y montañosas cercanas a Godoy Cruz.
Asimismo, el objetivo del programa es prevenir la propagación de la rabia y otras enfermedades zoonóticas.
La campaña es parte del proyecto «Interacciones Humano-Fauna en Sistemas SocioEcológicos de Tierras Secas: Los Perros de Vida Libre como una Problemática Socio-Ambiental», desarrollado por el IADIZA.
Igualmente, este proyecto aborda los desafíos derivados del crecimiento urbano hacia las zonas montañosas. Esto ha propiciado un aumento en la población de animales de vida libre.
Es importante destacar que estos perros y gatos, que vagan sin supervisión, han generado conflictos con la fauna silvestre y el ganado doméstico. Es por ello que aumentan los riesgos de transmisión de enfermedades y afectan el equilibrio ecológico.
El principal objetivo es reducir los riesgos asociados con la presencia de animales domésticos en zonas rurales.
Por lo tanto, al vacunar a estos animales se busca minimizar la transmisión de enfermedades tanto a la fauna silvestre como al ganado.
Además, se pretende apoyar a los puesteros rurales que utilizan perros protectores para resguardar su ganado. De esta manera se evitan daños sin recurrir a métodos letales y se reduce el riesgo de enfermedades entre estos perros y los animales salvajes.
La colaboración entre la Municipalidad y el IADIZA representa un avance significativo en la gestión de la salud animal. Como así también en la preservación del equilibrio ecológico en la región.
Entonces, la campaña no solo mejora la salud de los animales, sino que también contribuye a la conservación de la biodiversidad. Así, se fomenta una convivencia armónica entre la fauna silvestre, el ganado y las comunidades humanas.
En síntesis, este esfuerzo conjunto destaca la importancia de abordar las problemáticas socio-ambientales de manera integral. Ciertamente, combinando la ciencia y la gestión local se promueve un entorno más saludable y equilibrado.