Frenkel, solidaridad hecha canción

Las cajas de leche fueron donadas a la organización Voluntarios en Red Mendoza

La idea era clara: disfrutar de buenas canciones y ayudar a escuelas rurales de frontera y comunidades huarpes de Mendoza. El público respondió canjeando cajas de leche larga vida por entradas y el Plaza abrió sus puertas para que el ex La Portuaria desplegara todo su talento.

Así, “Río herido”, “Emergencias”, “El poniente”, “Bajo la piel”, “Espíritus salvajes”, “Células”, “Una mañana”, “Imágenes paganas” (clásico de Virus, en el disco, grabado junto a Lisandro Aristimuño), “Nada es igual”, “Conciencia”, “Entre tus huesos”, “Ritmo”, “10000 kilómetros”, “Nubes”, “Déjame caer”, “Así pasa el tiempo”, “Baby” y “El bar de la calle Roadney” fueron apareciendo sin quebrar en ningún momento el ambiente intimista. Aunque las tenues luces acariciaban los instrumentos casi tímidamente, hubo tiempo para el rock, el pop, las baladas, la psicodelia y las anécdotas de boca del propio autor.

Casi sin darnos cuenta, a medida que avanzaba el show, mientras repasábamos “Espontáneas”, íbamos haciendo un flash back por la carrera del artista.

ESPONTÁNEAS nació el año pasado entre El Calafate y Buenos Aires y consta de un CD y un DVD que invitan al disfrute de las letras y su poesía y de las melodías y sus ondulaciones.

La noche del sábado propuso, desde Godoy Cruz, un deleite para los sentidos, en el que la música y la solidaridad fueron las protagonistas excluyentes, de la mano de un artista que hizo de la reinvención su estilo propio.

6 abril, 2015